"American Gods", de Neil Gaiman

-Te echo de menos -admitió.

-Estoy aquí.

-Es cuando más te echo de menos. Cuando estás conmigo. Cuando no estás, eres solo un fantasma del pasado o un sueño de otra vida, entonces es más fácil.

Llevaba mucho tiempo queriendo leer algo de Neil Gaiman. El problema es que nunca sabía por dónde empezar... ¿sus historias más juveniles? ¿o mejor las adultas? Al final la biblioteca fue la que tomó la decisión por mí. En una de mis visitas vi el libro ahí, entre las novedades. Lo cogí y, por una vez, no me asustó el tamaño del tomo. Quería leerlo, me daba igual lo que tardara o las contracturas que fuera a tener en el hombro por llevarlo en el bolso de un lado para otro.

Neil Gaiman

El libro, que se publicó hace más de una década, cuenta la historia de Sombra, que acaba de salir de la cárcel. Lo único que desea después de los años que ha pasado preso es volver junto a Laura, su esposa, y llevar una vida normal lejos del mundo del crimen. Pero no todo es tan fácil: su mujer ha muerto en un accidente de tráfico junto con su mejor amigo. Y, al parecer, entre ellos había un affair. Sin hogar al que volver, Sombra acepta la oferta de convertirse en el guardaespaldas de un extraño personaje que se hace llamar Wednesday y recorrer los Estados Unidos junto a él. Conforme avanza la historia, nuestro protagonista descubre que su jefe en realidad es la reencarnación del dios Odín y que su objetivo es reclutar a otros dioses para comenzar una guerra entre las deidades antiguas, poco veneradas en la actualidad, y los ídolos que han surgido con los nuevos tiempos, a raíz de la tecnología. Por si esto fuera poco, Sombra se embarcará en un viaje interior para encontrarse a sí mismo y comprender su existencia.

Hablar de la historia de American Gods es complicado porque, aunque acabo de hacer un resumen, me he dejado miles de aspectos sin tratar. Y es que solo ha sido después de unos meses cuando me he visto capaz de reducir toda la trama a un único párrafo. Esto es porque mientras que lo leía, lo cierto es que no tenía ni idea de qué trataba. Me estaba encantando el libro, sí, pero no sabía muy bien de qué iba toda esa historia de Wednesday y Sombra y su viaje por los Estados Unidos. Nunca antes había leído algo parecido, si soy sincera. Neil Gaiman me ha sorprendido con creces. Cada vez que pasaba la página no sabía qué esperar, cuando menos lo esparaba se producía un giro inesperado y mis esquemas se veían alterados. Una historia nada predecible y que te mantiene con el corazón en un puño desde principio a final.

En lo referente a los personajes, estos son muchísimos, a veces incluso no sabía muy bien quién era quién, pero los principales se mantienen. Sombra está siempre presente de hilo conductor y Wednesday es la excusa para todos los acontecimientos que tienen lugar. Teniendo a estos dos de punto de referencia, olvidar algún personaje es una simple minucia. Los dos protagonistas están tan sumamente bien desarrollados... hacía mucho que no me encontraba con personajes tan profundos y tan perfilados. Actúan de forma coherente en todo momento, sin pegar bandazos inexplicables, a pesar de que la situación cambia de forma brusca. Wednesday es siempre igual de caradura y odioso, y Sombra es en todo momento el mismo hombre solitario y apesadumbrado que aparece al principio. Y esa constancia es algo que agradezco muchísimo cuando leo. Porque, a raíz de un detalle tan pequeño, me fue posible concebir a los personajes de este libro como reales, como personas que podrían haber existido de no haber sido American Gods una obra de ficción.

¿Y la forma de escribir de Neil Gaiman? Aquí está la razón por la que no le doy el 5 al libro. La prosa del autor está bien: es clara y precisa, aunque a veces dé detalles inútiles e irrelevantes para la trama, como es la descripción de ciertas actividades cotidianas que aportaban más bien poco a la historia. Me suele gustar que haya algo de poesía, imágenes y metáforas en los libros. Da igual que sea una obra escrita en prosa... para que una historia sea redonda ha de tener ese algo especial, esa belleza a la hora de unir palabras. Y eso ha sido algo que he echado en falta con Neil Gaiman. Pero, a pesar de ello, el autor escribe estupendamente e imaginación tiene para un rato.

En conclusión, American Gods me ha encantado, ha sido una lectura que he disfrutado muchísimo. Lo largo del libro está completamente justificado y, quitando que la forma de escribir del autor es demasiado sencilla para mi gusto, resulta una historia estupenda si lo que buscas es algo distinto. Los personajes estás maravillosamente trabajados y los giros en la trama son inesperados no, lo siguiente. ¿A qué esperáis para haceros con él? Además, que parece ser que habrá serie de televisión... yo lo dejo ahí.